GUSTAVO MUÑOZ CABRERA,Una vida al ritmo de una batería.

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Fuente: Revista MOTIVUS - Por Alejandro Morales Orellana - Profesor de Estado

El baterísta Gustavo Muñoz Cabrera, nace en el seno de una familia trabajadora un 28 de Agosto de 1955.  Su abuelo, reconocido personaje de nuestra ciudad, había fundado y mantenido a la cabeza, la prestigiosa imprenta “La verdad”, la que editaba un periódico del mismo nombre.

A la partida de sus abuelos, Doña Auristela Albornoz, quien sobrevive a su esposo, decide dejarla imprenta a la familia y como no existen los medios para contratar los operarios necesarios, nuestro personaje de 12 años, entonces debe junto a su madre y hermanos, trabajar incansablemente para obtener el sustento.

Gustavo es el mayor de los 5 hermanos del matrimonio formado por Don Jorge Muñoz Tapia y la Señora María Cabrera Albornoz: Sara María, Estela de las Mercedes, Carmen Gloria y José Ignacio.

 

Son muchas las personas que han llegado a la imprenta y se encuentran con un señor serio, siempre ocupado, que difícilmente le han visto transitar por las calles de la ciudad, sin embargo, esa persona, ha significado mucho para la cultura Cauquenina y que su corazón aún alberga lo que más ama en la vida: La música.

Este artista inicia sus estudios en la recordada Escuela Superior N°1 Antonio varas. Allí conoce a Jorge Sammur, compañero de curso.Él poseía el instrumento que para “Tavo” era  lo máximo ,una batería. Los bancos del colegio, envases de lata fueron los primeros elementos que usó para “Hacer ritmos”.Observar la batería y luego tocarla, le hace sentir una mayor atracción e interés por ella.

Al poco tiempo , en el patio de su casa, donde había ideado un pequeño teatro y con ingenio, su propia batería artesanal, construida con tarros de diferentes tamaños.

Recuerdo, con simpatía, una sabrosa anécdota.”Tavo”, desde su ventana , me ve pasar junto a Ariel Sánchez, con una guitarra. Me invita pasar al patio y nos solicita cantar mi canción “Piénsalo”, para mostrarme un arreglo de batería hecha para ese tema.Yo era en ese tiempo estudiante de Enseñanza Media, ahí me dí cuenta que estaba frente a un verdadero talento musical, dueño de una gran habilidad y virtuosismo de buen sentido rítmico. Desde cuando escuché el arreglo de la canción y hasta hoy,”Tavo” puso un sello cuando tocaba, las partes de la batería suponían una firma tan personalizada, que se le podía escuchar sin el resto de la música e identificar el tema.

No tardó en llegar, más adelante, al conjunto “The sound Shane”,dirigida por su primo Oscar Muñoz Frias y luego a “Los Poster”, compartiendo allí con “Toño Castro”, “Moncho Mendoza” y Claudio Apablaza. Ahí, ya no pudo parar “Se metió fuerte mi gusto por la música”-Evoca.

MODELOS Y DISCÍPULOS.

En los comienzos de su trayectoria admira al reconocido artista Alex Suazo, baterista del grupo tropical “Los Cometas”.”El era extraordinario, tremendo baterista, muchas veces fui a eventos solo a verlo tocar. Fue el , el que más me motivaba, era mi ïdolo máximo, solo quería ser como él”-Recuerda.

“Con los años conocí a Willy “Coyote” Aravena, experimentado músico, él traía los ritmos más desconocidos. Recuerdo que una vez, en Pelluhueme enseñó el ritmo del ,  Bossa nova, la moda de entonces”.

A nivel nacional admiró a Patricio Salazar y a Giolito.Su amor por el ritmo le  lleva al Conservatorio Nacional. Estuvo en las puertas, pero, la falta de medios económicos le hacen regresar a su ciudad.”Amargado, triste, con ganas de tirarme bajo el tren”-Rie.

Sus deseos por aprender solfeo rítmico y tocar por música, le hace adquirir un método de batería, escrito por el recordado Carlos Figueroa, y, ayudados por profesores  como Don Luis Humberto Rojas y otros, logra su objetivo. Los grupos de Talca y Concepción que integraba,  tenían como mayor requisito, leer partituras. De todas maneras a este joven batero siempre le agrado tocar libremente, improvisando.

Recuerda con simpatía al activo alcalde de Cauquenes Don Manuel Moya Medel.”Antiguamente había mucho trabajo para los grupos en Cauquenes y el , en sus propagandas nos anunciaba como: Oscarito Muñoz y sus operarios”-Vuelve a reir, con más ganas.

Luego de tocar en “Las gradas” de Pelluhue, integra “La sociedad elctrónica”, con Miguel Moya,”Granizo” con Johnny Pérez,”Los dedos congelados” con Mario Orellana, luego “Congreso” (De Cauquenes)con Floro Muñoz, Ricardo Reyes y Nano Suarez, el cantante Parralino Mario González. En Talca lo hizo con “Casablanca” y en Concepción con Ricardo Arce y finalmente con “Grupo Imagen” con Juan Carlos Soto.

Sus mejores recuerdos los tiene con el grupo “Granizo”. “Tocábamos con equipos propios,  eran malos, muy malos…pero felices, eran nuestros” -Dice con indisimulado orgullo.

Cree no haber podido nunca dedicarse a cabalidad a ayudar nuevos valores, solo por falta de tiempo, sin embargo, recuerda a jóvenes como Cesar Meza, Gerardo Salgado y Julio Alfaro, a quienes saluda a veces en la calle y lamenta haberles entregado solo un poco.

Hoy existen pocos grupos que se mantengan en el tiempo y existe poco interés.”Tavo” reconoce, ”No tomamos las cosas en serio, fue culpa de nosotros, a la música hay que dedicarle un 80% del tiempo, en mi caso, en algunos momentos le dedique un 10%,mi responsabilidad adquirida por la familia, no ,me lo permitía. Recuerdo en las grandes veladas de los liceos, debía hacer las entradas, la propaganda artística, las bandas de las reinas, editar la revista “Trampolín” y después ir al teatro a ensayo. Solo alcanzaba a conocer las canciones interpretadas. No podíamos aspirar a actuar en grandes eventos como el festival de rio, siempre chocábamos en lo mismo. La parte económica .Veíamos grupos con preciosas tenidas y hasta se cambiaban en la misma noche, para nosotros era inalcanzable. Dos de los grupos mantuvieron un buen nivel , por años.”Spiga” y “Granizo”.-

“SU ABUELO, SU ORGULLO”

En la foto, don Gustavo Cabrera con Arturo Alessandri y su famoso perro, de quién decía: "Mientras más conozco a los hombres, más quiero a mi perro".

“Mi abuelo fue una persona muy inteligente. En sus tiempos de estudiante, en Temuco, ganó varios certámenes de poesía, especialmente en las fiestas de primavera, donde conseguía el cetro de poeta laureado. Poseía el don de la palabra.”

En cierta oportunidad, en una de tantas giras políticas de Don Arturo Alessandri Palma, escucha la oratoria del joven estudiante de 17 años, queda gratamente sorprendido y le invita a viajar a la capital, donde recibiría su apoyo.
“Mi abuelo viaja y efectivamente Alessandri lo acoge. Con el tiempo llegaría a ser su secretario Privado del Presidente de la Republica”

En ese tiempo, ser periodista y dueño de un periódico y una imprenta, cobraba una gran importancia dentro de los círculos políticos. Don Gustavo inicia una exitosa carrera llegando a convertirse en Alcalde de Cauquenes y muy recordado por su obra señera a favor de sus habitantes.

“Continuar con su obra ha sido difícil. Hemos puesto todo nuestros esfuerzos y hemos avanzado con altos y bajos. Hemos tenido todos los problemas que afecta a toda la pequeña empresa.”

La familia Muñoz Cabrera sufrió, como tantas familias, un duro revés para el terremoto del 27 de Febrero.”Habíamos reparado recién la imprenta, se celebraba los 100 años de Neruda, vinieron de la televisión, grabaron las máquinas antiguas, los tipos, en fin. Nos habíamos preparado, pedimos un préstamo bancario. Vino el sismo y lo perdimos todo. Aun continuamos pagando las deudas” Nos cuenta resignado.

Gustavo, después de ese cataclismo vivió una odisea, digna de un guión para una película, situación que contó en un reportaje televisivo, donde cuenta su amarga experiencia que casi le costó la vida. No le importó las ruinas de su casa e imprenta, no pensó en nada. Salió en su auto desesperado en busca de su esposa, hijos y nietos, que se encontraban en un lugar bajo de la costa.  Al llegar se ve  en medio del tsunami, que le hizo vivir momentos sumamente dramáticos.

“Desde ese momento, hubo un giro en mi vida. Tenía dos casa, la imprenta, trabajo, recursos y ya no tenía nada. Comprendí que las cosas materiales no tienen gran valor .Lo importante son las personas, la familia que te rodea, no preocuparse de ganar y ganar, hay que dejar cabida a lo afectivo.”-Manifiesta.

“Después de esta triste historia, volví a tocar y pude comprobar que la música es espiritualidad, solo ella te da paz y tranquilidad. Más adelante me gustaría volver a tocar con connotados músicos de Cauquenes y dejar un registro en grabaciones”
Pienso que la idea sería maravillosa y que de concretarse esto en nuestra ciudad, cualquier agrupación debería empezar con el talento de este gran músico de nuestra ciudad.

Allí le veríamos, como siempre, amplificando cada lugar de su batería, sin dejar escapar detalles y estamos ciertos que en cada golpe pondrá sus variadas experiencias en su largo recorrido, ya que este niño-hombre que  enfrentó el mundo del trabajo a los 12 años y formó una familia a los 16 con Flor María Moraga, bendecido con tres hijos :Marcela Valeska y Jorge Gustavo, Francia Carolina, tiene mucho que decir y enseñar, porque Gustavo Muñoz Cabrera, es, una vida al ritmo de una batería.

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