Por Gustavo Cabrera Muñoz
Publicado en el año 1958 En El Periódico “LA VERDAD” y en el año 2000, en el Diario “El Horizonte”, ambos de la Provincia de Cauquenes
Mientras en el taller de mi periódico,
mis camaradas componen escritos,
en el desorden de mi mesa escribo
en tanto la noche camina al infinito.
Tipo tras tipo surge renovada la columna, y tras ella la forma modelada de una página de gris composición. Y cual milagro azul en la alborada, en un blanco papel sale grabada, de mi diario su ultima edición. Yo aporto a la tarea ilusionado: con fe en mi profesión y el alma entera, y cuando sale a la calle el pregonero, soy yo y mis camaradas, sus viajeros. Después la gente compra y lee tanto esfuerzo, y uno entre cien, mira en ese lienzo de papel, su sana inspiración. Y mientras el niño grita su albo encargo, tejen los más, su comentario amargo, como único premio a esta labor. {mxc}